Brandon llega a la pequeña pantalla: todo sobre Snapshot

En Snapshot, Brandon narra un thriller futurista de ciencia ficción que se desarrolla en una ciudad muy especial: Nueva Clipperton, que resulta ser una representación «virtual» de la Clipperton original.

Y, ¿por qué «virtual»? Porque Nueva Clipperton es, en realidad, parte de una iniciativa gubernamental conocida como Proyecto Snapshot, mediante la cual se construyeron unas complejas instalaciones de alta tecnología bajo la ciudad real que permiten «capturar» y «revivir» un momento concreto de lo sucedido en el Clipperton real y reproducir ese momento exacto en Nueva Clipperton, una herramienta que utilizan estamentos gubernamentales, entre ellos la policía para resolver crímenes complejos, y que resulta extremadamente cara de mantener, tanto que a veces se pone en duda su eficiencia real.

En esta historia, que no llega a las setenta páginas de extensión, Sanderson nos plantea una serie de conflictos morales sobre la realidad y las nuevas tecnologías, algo que hemos podido disfrutar hace poco gracias al audiolibro La Original, una obra co-escrita junto a Mary Robinette Kowald y de la que hablamos en esta entrevista exclusiva que hicimos con ella, donde trata temas como realidad aumentada, realidad virtual, clonación y pone a prueba nuestra concepción del futuro.

Nuestros dos protagonistas son Davis y Chaz, dos policías que trabajan en Nueva Clipperton para desentrañar un crimen, cada uno con un punto de vista ético bastante distinto sobre los dilemas y las consecuencias del uso de la tecnología del Proyecto Snapshot y el trato hacia sus habitantes. Para empezar, necesitan que el entorno del crimen sea lo más estéril posible, y eso implica interactuar lo menos posible para evitar que se generen Desviaciones del suceso original, porque cuando se recrea esa captura, todos los habitantes de la ciudad que aparecen en Nueva Clipperton creen ser reales. Tienen su cuerpo, sus recuerdos, sus vidas y no son conscientes de que son «falsos» hasta que se cruzan con un agente del mundo real. Y es que, cuanto más tiempo pasan en la simulación más probable es que estas copias a las que llaman duplis se den cuenta de que su existencia es una mentira, al igual que sucede cuando interactúan con objetos del mundo real. De hecho, aunque las personas reales pueden interactuar con los habitantes y los objetos de Nueva Clipperton al más puro estilo Westworld, no es posible llevarse nada consigo de vuelta al mundo real porque se desintegra… Salvo que lo lleves escondido dentro de tu propio cuerpo, algo que aprendemos gracias a Davis que está haciendo una colección de monedas antiguas con su hijo y busca una moneda de 2003, que piensa tragarse para mantenerla en caso de encontrarla.

Por todo ello, una acción que podría parecer inocua puede contaminar la captura dando lugar a consecuencias inesperadas y desviar tanto los acontecimientos que nunca puedan llegar a estudiar la escena del crimen tal y como sucedió en el mundo real.

En cierta manera, esta parábola recuerda a lo que pasa en La Guía del Mago Frugal, aunque allí tenga todo un toque más humorístico, pero, tocan tangencialmente temas parecidos, hasta un punto que hace que nos preguntemos si estas historias no acabarán estando relacionadas en un mismo universo, como es el caso de Legión y Perfect State, La Defensa del Elíseo y el Citoverso, y así.

Qué esperar de la adaptación de Snapshot

Como veis, a pesar de ser una historia corta, Snapshot posee los suficientes ingredientes para tener éxito en la pequeña pantalla bien como película o como mini serie, sobre todo en un momento histórico en el que cada día se plantean inquietudes relacionadas no con los duplis pero sí con IAs, igual que en su día sucedió con los clones.

Pero eso no impide que nos preguntemos qué consecuencias e impacto puede tener esta adaptación para el futuro de las obras del Cosmere por varios motivos, principalmente el hecho de que casi nadie está familiarizado con la obra de Sanderson fuera del Cosmere, y muchísimo menos sus relatos cortos (que ni siquiera tienen traducción en su amplia mayoría), y eso puede implicar consecuencias negativas sobre las expectativas que puedan tener productoras y showrunners si  el éxito de esta adaptación se transforma en el baremo para determinar el futuro de otras adaptaciones de Sanderson como Mistborn o El Archivo de las Tormentas.

Es posible que la publicación simultánea del recopilatorio de relatos cortos no-Cosmere, que saldría ala vez que Arena Blanca, siga un motivo estratégico para que el fandom tenga tiempo de leer la historia y familiarizarse con ella antes del estreno de la adaptación que quizás podríamos ver entre 2026 y 2027.

En cualquier caso, esta noticia supone también una alegría después de tantas decepciones sufridas a lo largo de los años tanto por el propio Brandon como por nosotros, los lectores, que además leemos el State of the Sanderson con avidez cada año en busca de novedades, y es que llevamos mucho tiempo esperando una adaptación.

En lo personal, y como no podía ser de otra manera… Por mi parte, ¡espero que la plataforma elegida sea Apple TV!

Tenía que decirse, ¡y se dijo!

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