Raoden es un experto a la hora de manipular su entorno. Esto, en mi opinión, no lo convierte en un “manipulador”. (Podréis leer sobre un manipulador de verdad en mi próximo libro). Raoden simplemente sabe cómo tomar lo que se le ofrece y obtener lo mejor de ello. En cierto modo, en esto radica el alma de la creatividad. Raoden es como un maestro compositor o un artista, excepto que, mientras ellos toman imágenes o sonidos y los combinan para satisfacer sus necesidades, él toma la situación y la adapta para crear algo útil. Fuera de Elantris, tomó los edictos de su padre y los volvió contra él. Sin embargo, arrojado a una situación terrible como el pozo que es Elantris, Raoden tiene realmente la oportunidad de brillar.

Es una especie de magia en sí mismo. He conocido a gente que se parece un poco a él en este mundo, gente que puede desafiar las convenciones y la realidad, y hacer que las cosas funcionen. De alguna manera, Raoden puede hacer tres de dos. Puede tomar las piezas y combinarlas de nuevas maneras, creando algo más grande de lo que la mayoría de la gente creía posible.

En resumen, es el héroe perfecto para este tipo de libro. Cuando estaba escribiendo Elantris en el invierno de 1999 y la primavera de 2000, estaba terminando mi licenciatura en la Universidad Brigham Young. El libro que había escrito antes se llamaba La Sexta encarnación de Pandora, sin duda el libro más extraño y menos parecido a Brandon que he construido. Pandora era una historia de ciencia ficción sobre un hombre que se hacía inmortal mediante una cuidadosa, y costosa, aplicación de la nanotecnología. El proceso lo volvía lentamente loco.

Pandora era un libro oscuro y espeluznante. El personaje del hombre podía soportar heridas alarmantes sin morir. Uno de los temas principales de la novela era el tratamiento de la psique de un hombre que podía masacrar a miles de personas mientras le disparaban, para verse restablecido poco tiempo después. Era un libro bastante violento, probablemente el más perturbador que haya escrito.

Cuando lo terminé, reaccioné contra él queriendo idear una trama que no dependiera en absoluto de la violencia. El resultado fue Elantris. Quería contar una historia sobre un héroe que pudiera triunfar sin tener que golpear a la gente que se le oponía. Le quité sus capacidades físicas y sus recursos reales, dejándole sólo su ingenio y su determinación.

Algunas personas me han hecho notar que les parece extraño que Elantris haya caído sólo diez años antes del comienzo del libro. Les parece que las leyendas lo hacen parecer más antiguo, más alejado. En realidad, esto es intencionado. Quería que fuera difícil recordar, a veces, que sólo han pasado diez años desde que cayó la majestuosa ciudad.

Al igual que Elantris se está desmoronando mucho más rápido de lo que debería haber sido posible, está convirtiéndose en leyenda mucho más rápido de lo que la gente podría haber pensado. En parte se debe al poder de los rumores y las historias en una tierra sin la capacidad de generar registros visuales (como por ejemplo, películas). Y por otra parte tenemos el “misterio” de Elantris. Algo muy malo ha ocurrido, y nadie lo entiende. En cierto modo, ahora que Elantris ha desaparecido, todo el país se ha quedado con un vacío en el interior de su alma.

SPOILER (SELECCIONA EL TEXTO CON EL RATÓN PARA LEER)

Por cierto. Sí, la línea «Su espíritu ha huido» pretendía ser otro pequeño juego de palabras con el título de entonces del libro El Espíritu de Elantris.