El Aliento de los Dioses
Junto a «Elantris» y «Nacidos de la Bruma», «El Aliento de los Dioses» es uno de los libros recomendables como primera toma de contacto a la hora de adentrarse en el Cosmere. Se trata de una novela autoconclusiva ambientada en el mundo de Nalthis, aunque eventualmente Brandon tiene pensado escribir una secuela. En Nalthis la magia se basa en los colores, aunque conforme nos adentramos en la historia descubrimos el tinte lúgubre que se esconde tras este idílico mundo. Hace años, el monarca de Idris firmó un tratado con el reino de Hallandren según el cual el rey Dedelin enviaría a su hija mayor, Vivenna, para casarse con Susebron, el rey-dios de Hallandren. Vivenna ha sido adiestrada durante toda su vida para ser una novia adecuada para Susebron y así cumplir con su deber y ayudar a forjar una paz estable entre los dos reinos. Ese era el plan, pero el monarca de Idris envía a su hija Siri, desobediente e independiente, en lugar de Vivenna. Mientras intenta encontrar su lugar en la corte de Susebron, Siri descubre la verdad oculta sobre el rey-dios. En Idris, Vivenna se siente intranquila y teme que su hermana no esté preparada para esa nueva vida, por lo que decide viajar a Hallandren. Allí se reúne con la gente de Idris que trabaja en la capital, T'Telir, y comienza una nueva vida de espionaje y sabotaje. El plan de Vivenna es rescatar a Siri, aunque tal vez esta ni necesite ni desee ser salvada.
Aunque no es imprescindible, es recomendable leerlo antes de adentrarse en El Archivo de las Tormentas, especialmente antes de Palabras Radiantes.