Uno de los capítulos más cortos pero más potentes del libro.

Añadí el conflicto del “jefe arteth” (la idea de que todo el mundo rechace el nombramiento) más tarde, en el proceso de revisión, para poder tener algo más que empujara a Hrathen al límite. Lo único que me preocupa de esta escena es el ritmo: si he construido bien la novela, parecerá un clímax que se ha ido gestando lentamente durante algún tiempo. Si no lo hago bien, este capítulo parecerá un poco fuera de lugar y carecerá de fuerza para el lector.

Aquí es donde realmente han llevado los capítulos de Hrathen. El cuestionamiento y la duda, los problemas con Dilaf y la conversión… Ha sido derrotado en todo momento. Ya era hora de que se derrumbara, se rindiera o hiciera algo espectacular. En cierto modo, hace las tres cosas.

Sí, se supone que el hecho de que beba el veneno es un toque. En teoría, esto le empujará a la siguiente sección del libro. Las partes más lentas de la novela están empezando a disminuir. A partir de ahora, los acontecimientos empiezan a desarrollarse un poco más rápido. Aun así, esta es probablemente una de mis novelas más lentas, lo que forma parte de su encanto, como ya he señalado en otra anotación.